Un maestro llevó a sus discípulos a una habitación oscura.
¿Qué ven? -les preguntó-.
Nada, maestro -le respondieron-, la oscuridad es absoluta y no nos deja ver.
Entonces dio una palmada, y se encendieron al mismo tiempo mil lámparas de intensa luz. ¿Qué ven ahora? -les preguntó otra vez-
-Nada, tampoco dijeron los discípulos- Esta luz cegadora nos impide abrir los ojos para ver.
-Aprendan, pues -les enseño el maestro- , que ni en la luminosidad absoluta ni en la completa oscuridad el hombre puede ver.
Por eso estamos hechos de luces y de sombras, para podernos ver los unos a los otros.
¡Ay de aquél que no perdone la oscuridad que hay en el alma de su hermano, pues no lo podrá ver, y estará solo!
Y ¿Ay de aquél que no busque poner luces en su oscuridad, pues a sí mismo se perderá!
Así dijo aquel sabio.
Y concluyó:
Estamos hechos de sombras.
¿Dónde mejor que en nosotros puede brillar la luz?
Estimad@s Interpreto que aun la persona que se considera inmune ante situaciones extremas a salir «perdedor» en algun momento paso’por una situacion donde tuvo que realmente demostrar sus fortalezas para salir airoso .Todo lo que nos sucede es aprendizaje y
somos muchos los privilegiados de tener herramientas muy sencillas y faciles para que al aplicarlas nos ayuden a un final feliz.Por que mas de una vez esperamos a estar con un pie en el vacio para reacconar??Sera que confiamos que nuestra luz triunfara ante las sombras sin grandes problemas?Coincido plenamente con el titulo :ESTAMOS HECHOS DE SOMBRAS gracias
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Hermosa enseñanza!! Siempre es un placer leer sus » articulos». Gracias!!!
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HERMOSO CUENTO Y CUANTA VERDAD EN EL. AGRADECIDA POR APORTE. ABRAZO GRANDE🙋
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